30 sept 2010

Lectores...

Hace ya algunos días vi una película, exactamente el sabado pasado, cuya tarde convertí en mi momento de osio sagrado despues de una semana de ocupaciones que me traían a latigazos como esclavo contruyendo pirámides.
Bueno, bueno, ya me alejé demaciado del punto que quiero tratar; la película fue "La ciencia del sueño" ("La Science des réves") protagonizada por Gael García Bernal y digo, que chica se negaría a ver casi dos horas de su actuación; Stephane un joven alejado de la realidad con serios problemas mentales en los que no percibe su medio tal cual es ¿vivía en un sueño o soñaba despierto?...


En fín, recomiendo esta muestra para sus ratos de escape mental y si tienes un amor frustrado no la veas por ahora pero si andas animicamente neutral, disfruta un toque de cine alternativo europeo.

Vale, me volvi a desviar del tema, pero aquí te va y si vuelvo a divagar no te preocupes seguro regresare a lo que te quiero decir.

¿Alguna vez has caminado por la calle y de pronto te topas con una persona justamente en el mismo eje, mismo paso y mismo instante?
Hasta la pregunta es irrelevante, claro que lo has hecho, vivimos en un mundo tan compactado que al andar es casi imposible que no ocurra.

El caso es que, al toparte intentas corregir el camino y la otra persona tambien lo hace, pero al cambiar la direccion se van al mismo extremo y vuelven a coincidir repetidamente. Este fenómeno es llamado en la película como ALETORIDAD PARALELA SINCRONIZADA.
Dónde se trata de explicar, en un mundo paralelo hay acciones aleatorias que hacen coincidir sincronizadamente a las personas, argumentando que ya era previsto que ambas chocarían en algún momento de sus vidas.

La palabra clave de ésta relación es COINCIDIR hija de la palabra COINCIDENCIA, familiar cercana de la palabra CASUALIDAD que se asemeja a mi punto de vista sobre CASUALIDAD versus DESTINO.

¿Qué es destino?, en cualquier viaje tienes como destino el lugar al que sabes que llegarás es decir, el destino es algo que ya estableciste y no lo que tratan de hacerte pensar cómo el evento que magicamente ocurrió porque te lo mereces y un ser divino te lo mandó.

Mi lado científico, me inclina más hacia la casualidad que es casi tan probable como el efecto mariposa. En éste entorno que contiene millones de moléculas y átomos, considerando la teoría de las colisiones y la de las cuerdas de Einstein, es lógico pensar que ese instante ilógico en el que cruzas repetidamente el camino de una persona es predispuesto nanometricamente y no de forma divina.
Casualidad, felicidades, vas ganando uno a cero contra el destino. Ahora bien, no confundamos la CASUALIDAD con la CAUSALIDAD, esa otra es la pariente malintencionada del DESTINO.

Terminé de expresar todo sin desviarme, será que mis pensamientos no chocaron con otros por la Aletoridad Paralela Sincronizada.

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